Los terrarios de vidrio son la elección preferida de los herpetólogos profesionales. Ofrecen la mejor visualización para su animal; son adecuados para condiciones húmedas y húmedas, son higiénicos y fáciles de limpiar.
El vidrio también mantiene el gradiente de calor correcto de manera más segura y fácil: mantener el gradiente de calor correcto es fundamental para el bienestar de los reptiles y anfibios, ya que utilizan fuentes de calor externas en su entorno para regular la temperatura de su cuerpo.
En la naturaleza, estos animales se mueven dentro de su hábitat (de la luz del sol a la sombra, o de la superficie a las madrigueras, por ejemplo) para regular la temperatura de su cuerpo. Si se enfrían demasiado, su metabolismo se ralentiza (y en condiciones de demasiado calor o demasiado frío, entran en estados de inactividad o hibernación). Mantener la temperatura adecuada es vital para funciones corporales como la digestión. Es importante proporcionar las condiciones de temperatura adecuadas para que el animal crezca y prospere.
Sin embargo, para muchos reptiles, no se trata simplemente de proporcionar una temperatura constante. Requieren un gradiente térmico, o un rango de temperaturas desde un extremo alto hasta un extremo bajo. Así, el animal puede pasar a una temperatura más alta o más baja según sus necesidades en cada momento.